La marca española de automóviles ha
mostrado desde sus primeros años de vida un gran interés por la
internacionalización de sus vehículos. Ya a finales del decenio de 1960, cuando
la fábrica de Barcelona se convirtió en planta piloto del exitoso modelo 600,
la exportación de vehículos completos, así como de conjuntos SKD y CKD del
mismo, convirtió a SEAT en un referente internacional dentro de la industria
mundial del automóvil.
El modelo que reemplazó en
1974 a los entrañables 600 y 850, el práctico 133, había sido diseñado y
desarrollado íntegramente por SEAT, cuya fábrica de Barcelona sería designada
planta piloto para este nuevo modelo, el primero de la marca en ser fabricado
en la ribera sur del Mediterráneo.
SEAT 133 |
En un principio, desde 1979,
se exportaron desde España los conjuntos semidesmontados de automóviles (SKD)
para su ensamblaje final en la planta que NASCO opera en el distrito cairota de
Helwan, a orillas del Nilo.
En una segunda etapa los
vehículos fueron exportados en régimen de CKD, es decir en conjuntos
completamente desmontados, de modo que el valor agregado local fue
incrementándose progresivamente.
Finalmente, en una tercera
etapa, que coincidió con la discontinuación del modelo en España en 1980, la
línea de montaje fue vendida por SEAT a NASCO de modo que la tasa de
integración local fue de nuevo incrementada.
En 1981 el 133 fue el modelo
más vendido en el mercado egipcio.
La fabricación de vehículos SEAT fue ampliada a modelos
del segmento superior, el B, como el 127 cuatro puertas y el Fura cuatro
puertas, que eran igualmente desarrollos exclusivos de la marca española, y para
los que por lo tanto Barcelona ejercía de planta piloto.
Esta fructífera colaboración industrial hispano-egipcia
se prolongó hasta 1995.
Años más tarde, en 2017,
SEAT volvió de nuevo sus ojos a la ribera sur del Mediterráneo, concretamente a
Argelia, donde opera una moderna fábrica en colaboración con el socio local
SOVAC.
La planta, ubicada en la
localidad de Relizán y dirigida por personal de SEAT, cuenta con una capacidad
de producción de 200 vehículos diarios y provee al mercado argelino de modelos
de las marcas Volksvagen, Skoda y obviamente SEAT.
SEAT lidera este proyecto desde su inicio y, a partir
de ahora, esta responsabilidad se amplía a toda la región. La compañía
automovilística española será la encargada de coordinar la estrategia y la
expansión del Grupo Volkswagen en el norte de África.
De hecho, la puesta en funcionamiento de la planta de
Relizán ha disparado las ventas de SEAT en Argelia este año, gracias al
ensamblaje de la nueva generación del Ibiza.
SEAT Ibiza fabricado en Argelia |
Al Ibiza acompañan desde hace pocos meses el León y el Arona,
que, como aquél, son exportados desde España en conjuntos CKD.
Otra de las misiones de SEAT en Argelia es la de
desarrollar un panel de proveedores componentes de primer nivel de modo que
pueda incrementarse la progresivamente la tasa de nacionalización de sus vehículos,
así como crear un tejido industrial competitivo en torno a la planta.
Por otro lado, SEAT incorpora a los motores de sus
vehículos en Argelia la tecnología de Gas Natural Comprimido, especialmente adecuada al país
norteafricano, que es uno de los mayores productores mundiales de gas natural.